Estados Unidos instó este sábado a «mantener abierto» el paso fronterizo por el que ingresó más temprano la ayuda humanitaria a la Franja de Gaza y destacó que «los civiles palestinos no son responsables del horrendo terrorismo de Hamas y no se les debe hacer sufrir por sus actos», en medio del nuevo conflicto entre ese movimiento islamista e Israel iniciado hace dos semanas.
«Estados Unidos recibe con satisfacción la entrega de un convoy de 20 camiones con ayuda humanitaria muy necesaria para la población de Gaza, la primera desde el terrible ataque terrorista de Hamas contra Israel del 7 de octubre», indicó el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, en un comunicado.
«Con este convoy, la comunidad internacional empieza a abordar la crisis humanitaria de Gaza, que ha dejado a sus habitantes sin acceso a alimentos suficientes, agua, atención médica y refugio seguro», agregó en referencia al asedio israelí como represalia a la incursión en su territorio.
«Con este convoy, la comunidad internacional empieza a abordar la crisis humanitaria de Gaza, que ha dejado a sus habitantes sin acceso a alimentos suficientes, agua, atención médica y refugio seguro»
Un total de 20 camiones pudieron cruzar en esta primera misión humanitaria y tras bajar su carga el paso volvió a cerrarse y se desconoce cuando volverá a ser abierto para continuar con la asistencia.
De acuerdo a las autoridades egipcias, 13 vehículos llevaron medicinas e instrumentos médicos, cinco comida y dos agua potable. Ninguno ingresó combustible, necesario para restablecer el suministro eléctrico.
Blinken resaltó que la apertura del paso de Ramah, el único que une la Franja de Gaza con territorio egipcio, se consiguió gracias a negociaciones entre las autoridades de Estados Unidos, Israel y Egipto.
«Instamos a todas las partes a que mantengan abierto el paso fronterizo para permitir la circulación continua de la ayuda que es imprescindible para el bienestar de la población de Gaza. Hemos sido claros: Hamás no debe interferir en el suministro de esta ayuda vital», apuntó.
«Los civiles palestinos no son responsables del horrendo terrorismo de Hamas y no se les debe hacer sufrir por sus actos», manifestó.
«Hay que proteger las vidas de los civiles y la ayuda debe llegar urgentemente a quienes la necesitan. Seguiremos colaborando estrechamente con los socios de la región para insistir en la importancia de respetar el derecho de la guerra, apoyar a quienes intentan ponerse a salvo o prestar asistencia, y facilitar el acceso a alimentos, agua, atención médica y refugio a los ciudadanos dondequiera que se encuentren en Gaza», agregó.
Por otro lado, Blinken indicó que sigue trabajando «urgentemente» para facilitar que los ciudadanos estadounidenses y sus familiares directos puedan salir «de forma segura» de la Franja de Gaza, bombardeada constantemente por Israel.
Al menos 31 ciudadanos estadounidenses murieron y 13 están desaparecidos, indicó el miércoles pasado la Casa Blanca.
El presidente Joe Biden, que realizó esta semana una visita relámpago a Israel, informó el martes que también había estadounidenses entre las personas «retenidas por Hamas».
Dos rehenes estadounidenses apresadas por el grupo palestino fueron liberadas el viernes y llegaron a Israel.
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